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La Federación Empresarial de Corrientes, Fecorr, emitió un comunicado en el cual expresa su más severa intransigencia a ceder parte de las ganancias con los trabajadores. Es un proyecto que generó polémica a nivel nacional y enfrenta a la CGT y la Unión Industrial, además de otras cámaras empresarias. Desde Corrientes responden que es un ataque a la confianza y se viola el derecho la propiedad privada.

El proyecto de ley del Diputado Nacional, Héctor Recalde tiene sus coletazos en la provincia. Es que la intención de dar participación en las ganancias de las empresas a los empleados genera rispideces de La Quiaca a Ushuaia. Por lo tanto Corrientes no es una isla y sólo faltaba que sus empresarios ratificaran la negativa a la intencionalidad del legislador que surgió de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA). Por medio de un comunicado expresan con contundencia la oposición a la iniciativa, no sin exponer sus argumentos. Dice textualmente el parte de prensa “significa una violación al derecho de propiedad del empresario y constituye un ataque a la confianza en Argentina”. Interpretando además que en caso que se convierta en Ley la moción generará a futuro “desinversión y marcha atrás de innumerables proyectos que ya estaban dispuestos a su ejecución”. Describe asimismo que esa intención de repartir las ganancias genera una enorme “preocupación” en el empresariado. También provoca rechazo en los empresarios de la Fecorr el derecho de información que cede el proyecto a las organizaciones sindicales, “constituyendo de esa manera la inadmisible cogestión de éstos en la administración de las empresas, violando el ejercicio de los derechos de propiedad privada debidamente garantizados por la Constitución Nacional y las leyes orgánicas” puntualiza el comunicado. “En las condiciones económicas actuales de gran presión impositiva y con cada vez mayor burocracia ineficiente, el proyecto tiende a profundizar las trabas y el desaliento en una realidad económica que clama por inversiones productivas que siempre conllevan un riesgo que la empresa debe soportar. En este marco, los empleados también serán perjudicados porque se reducirán las fuentes de trabajo” advierte la Federación Empresarial de Corrientes en coincidencia, por ejemplo, con la Unión Industrial Argentina (UIA). La evaluación negativa de los propietarios de grandes empresas correntinos se extiende al temor de perder firmas que ya están radicadas en el país, en caso de sancionarse la Ley, e incluso que sea un factor que ahuyente a los inversores con intenciones de llegar a la Argentina. “Todos sabemos que los vecinos países hermanos son los que en la región hoy captan la mayor cantidad de inversiones, al mismo tiempo que negocian con mercados internacionales que tradicionalmente fueron de la Argentina, justamente por las garantías jurídicas que ofrecen, como por la confianza que sus dirigentes inspiran” concluye el escrito remitido a los medios de comunicación.