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El refugio para las personas en situación de calle ubicado en el salón multiuso de la iglesia San Francisco, continúa albergando a un promedio de 35 personas por noche. Tras ampliar el servicio, los voluntarios de Cáritas se preparan para atender a más refugiados por la ola de frío.  

El albergue funciona ahora desde las 20 hasta las 10 y los beneficiarios cuentan con comida caliente, desayuno, calefones para higienizarse y asistencia médica y social. Además los voluntarios han conseguido cita especial para que los “sin techo” asistan al Registro Civil para tramitar su DNI.  Al respecto, Elena Sehman, la directora de Cáritas Arquidiocesana, comentó que este jueves, “gracias a los jóvenes que se han preocupado, las personas irán al Registro para tramitar su documentación, ya que muchos no la poseen”. “El refugio está en las mejores condiciones gracias a las colaboraciones de la comunidad y de las empresas”, aseguró.