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El gobierno de Honduras reaccionó con optimismo a la aprobación por la Organización de Estados Americanos (OEA) de una misión que evaluará la posibilidad de su retorno a la organización.

El presidente hondureño, Porfirio Lobo, dijo en rueda de prensa que "estoy muy contento por la decisión de la OEA de enviar gente a revisar, analizar e investigar lo que ocurre en Honduras y que nos señale lo que estamos haciendo incorrecto", según lo cita el diario El Heraldo. Lobo agregó que "lo importante es que, como nación, Honduras tiene la voluntad de mantener relaciones cordiales con todos los países del mundo, sobre todo con nuestros hermanos latinoamericanos... y es fundamental que todo se haga en el marco del respeto a los derechos humanos y el cumplimiento de los acuerdos de paz (para solucionar la crisis hondureña)". Los representantes ante la Asamblea General de la OEA, que el año pasado suspendió a Honduras tras el golpe de Estado contra Manuel Zelaya, acordaron que el grupo de expertos presente sus recomendaciones antes del 30 de julio. clic Lea: Una Comisión estudiará el regreso de Honduras a la OEA  En Lima, Dan Collyns, indicó que pese a no estar en la agenda, la situación de Honduras acaparó gran parte de la atención en la cita del organismo, cuyos integrantes están divididos a causa de la posible readmisión de Honduras. Varios gobiernos de la región, como Venezuela y Brasil, aún no reconocen la legitimidad de Lobo como presidente, pero otros como Colombia y Perú consideran su elección legítima. "Esperamos que al final los resultados sean positivos, simplemente coherentes con las acciones que está tomando el presidente (Lobo) para que eventualmente el tema de la OEA simplemente sea parte de la historia y que podamos ser incorporados", dijo el canciller de Honduras, Mario Canahuati, a la radio HRN en Tegucigalpa. Destacó que Lobo está dando pasos para un diálogo nacional, el fortalecimiento de la paz y la reconciliación, a lo que se suman otras acciones como la creación de la Comisión de la Verdad, en mayo pasado, y la protección de los derechos humanos